El más veterano entre todos ellos es la Comisión Internacional de Protección Radiológica (CIPR), constituido en 1928 bajo la denominación de Comisión internacional para la protección frente a los rayos X y el radio, nombre que expresa que su cometido se refería a las aplicaciones médicas de la radiación. Originalmente estaba formada solamente por médicos y biólogos, pero al ampliar sus cometidos a la protección radiológica de instalaciones nucleares y radiactivas, en 1950, además de cambiar de nombre ha incorporado en su seno a físicos, químicos, ingenieros, etc.
De ella dependen cuatro comités dedicados a:
Efectos de las radiaciones.
Definición de límites secundarios de la carga corporal.
Protección radiológica en medicina.
Implantación de las recomendaciones que ella formula.
A pesar de que esta Comisión no tiene carácter intergubernamental, su prestigio y la solidez científica de sus recomendaciones hacen que éstas sean aceptadas por todos los organismos internacionales y adoptadas por las reglamentaciones oficiales de todos los Estados que desarrollan actividades nucleares.
El organismo nuclear intergubernamental más importante del mundo es el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), creado por las Naciones Unidas en 1956. La sede del Organismo está en Viena, y forman parte de él 112 Estados, según datos de finales de 1991. Sus cometidos son muy amplios dentro del campo de la energía nuclear, tales como: investigación y desarrollo, celebración de conferencias científicas, control sobre los usos pacíficos de los materiales fisionables y formulación de recomendaciones sobre seguridad nuclear y protección radiológica. La reglamentación española exige que estas recomendaciones del OIEA – como las de los restantes organismos internacionales de los que España forma parte – sean de obligado cumplimiento en las instalaciones nucleares y radiactivas españolas.
La Agencia de Energía Nuclear de la OCDE (NEA) fue creada en el seno de la Organización de Cooperación y Desarrollo Económico en 1957. Forman parte de ella 19 Estados europeos, además de Canadá, Estados Unidos, Japón, Australia y Nueva Zelanda; su sede está en París. Dentro de la Agencia existen cuatro direcciones técnicas: ciencias y técnicas nucleares; desarrollo tecnológico; seguridad nuclear; protección radiológica y gestión de residuos radiactivos. Al pertenecer España a la NEA, sus recomendaciones – al igual que ocurre con el OIEA – son de obligado cumplimiento en España.
La Comunidad Europea de Energía Atómica (EUROATOM), hoy integrada dentro de la Comunidad Europea, establece también una normativa sobre protección radiológica, que es exigida a los países de la Comunidad.
Existen otros varios organismos internacionales que formulan recomendaciones sobre protección radiológica. Como más importantes merecen citarse: la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Organización Internacional del Trabajo (OIT), y el Comité Científico de las Naciones Unidas para el Estudio de las Radiaciones Atómicas (UNSCEAR).